JUECES PARA LA DEMOCRACIA quiere mostrar su enorme preocupación porque el llamado plan de ajuste pueda terminar afectando a umbrales mínimos de eficacia de un sistema judicial ya saturado. Ello introduce un riesgo cierto y grave de lesión del derecho fundamental de acceso a la justicia y a obtener tutela efectiva de sus tribunales. La reducción de inversiones previstas y necesarias para la nueva organización de la oficina judicial, para la adaptación de la planta judicial y para la incorporación de las nuevas tecnologías, supone también un coste socialmente inasumible.
Jueces para la Democracia quiere, en estos momentos reiterar su compromiso con la ciudadanía y no renuncia a la adopción de medidas de presión legítimas si se abandonaran proyectos e inversiones para conseguir una justicia eficaz.
Raquel Alastruey Gracia
Jose Manuel Ortega Lorente