JUECES PARA LA DEMOCRACIA, desde el máximo respeto a la soberanía popular que representa la Asamblea legislativa argentina, quiere manifestar su profunda preocupación por el Proyecto de Ley de Reforma del Consejo de la Magistratura de la República Argentina, que pretende que el número de Jueces sea inferior al de representantes del legislativo y del ejecutivo.
Si los Consejos se han convertido en pieza clave de un Estado constitucional de Derecho, es porque se configuran como órganos autónomos de gobierno, que no sólo marcan la política judicial en búsqueda de un servicio público eficiente, sino cuya principal finalidad es velar por la independencia de Jueces y Tribunales, al tiempo que garantizan, también, que éstos no abusen de su poder. Una buena cultura democrática de la institución judicial, entiende su independencia como un derecho del ciudadano y exige que ésta no sea perturbada por los otros poderes del Estado. No se trata de que los jueces se autogobiernen -pues el control de todos los poderes del Estado corresponde a la soberanía popular- pero sí de garantizar que el órgano de gobierno sea verdaderamente autónomo, sin posibilidad de control por cualquier otro de los Poderes; y en la búsqueda de este equilibrio, por ejemplo, en el modelo español, la mayoría de los componentes del Consejo General del Poder Judicial han de ser de procedencia judicial.
Desde la confianza en que tal cultura democrática es compartida por Argentina, confiamos en que no deslegitimen al Consejo de la Magistratura, poniendo en peligro su autonomía, y, por ende, la independencia judicial.
Secretariado de JUECES PARA LA DEMOCRACIA-España
Madrid, 22 de Febrero de 2006