Día tras día estamos asistiendo con perplejidad y con mucha preocupación comportamientos de un sector de la sociedad que expresan una gran dosis de xenofobia y racismo. Hace dos días más de mil vecinos de un barrio de Terrassa, auspiciados por jóvenes neonazis se manifestaban por la ciudad reclamando la expulsión de la comunidad magrebí que vive en aquel barrio. En el curso de esta manifestación un magrebí fue gravemente apuñalado y varios comercios de inmigrantes fueron dañados. Ayer nuevamente las casas de varios de ellos fueron saqueadas por sus vecinos. Asimimismo, en cuatro discotecas de Maremagnum de Barcelona, se ha prohibido la entrada a personas de color, árabes y musulmanes. Recientemente en Madrid en el barrio de Malmea, sesenta familias de rumanos fueron drásticamente desalojados de sus viviendas, sin que se hubiera previsto por las Autoridades municipales una alternativa que les asegurase el derecho a la vivienda.

Nuestro Estado social y democrático de Derecho en la Constitución se asienta en un modelo de convivencia basado en la tolerancia recíproca y en la integración efectiva de culturas diversas. El art. 14 de la C.E. prohibe cualquier tipo de discriminación fundada en circunstancias personales, sociales, de religión, raza o cultura y establece un mandato explícito hacia los poderes públicos ordenándoles la promoción de las condiciones que hagan posible que la libertad y la igualdad del individuo y de los grupos en que se integra sean reales y efectivos.

JUECES para la DEMOCRACIA, hace un llamamiento a los grupos vecinales enfrentados para que sustituyan el odio y la violencia, por el diálogo y el respeto mutuo con voluntad de convivencia sin exclusiones y EXIGE de los Poderes Públicos que se corten de raíz estos brotes de violencia y discriminación, deteniendo a sus responsables, a fin de que respondan ante la Justicia de estos graves hechos.

Corresponde a las Autoridades políticas y locales promover condiciones sociales de plena ocupación, vivienda, sanidad y educación que dignifique la condición humana de todos, incluída la de los inmigrantes, a fin de lograr su plena integración con pleno respeto a la diversidad multicultural que caracteriza a nuestra sociedad.

Madrid, 16 de Julio de 1.999

EL SECRETARIADO

JUECES para la DEMOCRACIA